Podría sacar matemáticamente la cuenta en meses, semanas, días. Obtendría cifras y estadísticas de sonrisas, logros, desaciertos y lágrimas derramadas en ese recuento de números.
Incluso podría reducir el tiempo y
contabilizar abrazos, miradas y momentos de ternura insospechada de los que fui
testigo y partícipe en apenas una partecita de esa sumatoria de tiempo...
Podría tantas cosas!! Todas, excepto
la única que realmente quisiera hacer en este día... porque en un día como hoy,
en 1976, ella abría sus ojos a este mundo... sin saber que un día casi 36 años
después, abriría los de alguien más trayendo también una nueva vida a una que
ya existía.
0 descorrieron el telón:
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