23 abr 2012

Día Internacional del Libro


 “De los diversos instrumentos inventados por el hombre, el más asombroso es el libro; todos los demás son extensiones de su cuerpo… Sólo el libro es una extensión de la imaginación y la memoria”.

 Jorge Luis Borges.


Uno de mis primeros regalos fue precisamente un libro. Tenía exactamente un día de vida cuando mi tía Ana - quien en este preciso momento debe estar riendo cosmicamente desde alguna parte ante la palabra que nunca, jamas, utilicé para referirme a ella mientras me acompañaba terrenalmente - me obsequió para "su" cumpleaños. Sí, sí...  mi buena Ana era otro cangrejo de pura cepa amante de aquello que con el tiempo aprendí, serían mis compañeros de toda la vida.

Aquella vez eligió a Saint Exupery, El Principito por supuesto... y si bien lo abrí por primera vez unos tres años despues para mirar los dibujos y los colores, el romance entre ellos y yo comenzó casi casi desde el momento en que empecé a respirar. Pero el sombrero/elefante/serpiente, el zorro y el rubiecito que no paraba de hablar de su rosa son otra historia! Una que amerita contarse a solas y en exclusiva...

Que decir de la aventura anual de la Feria del Libro! Era como ir a una juguetería o a un kiosko y saber que podía elegir el chocolate mas exotico o la Barbie cuya propaganda recién empezaba a salir en la tele... con la salvedad de que poco me gustaban las Barbies y el chocolate siempre fue mejor comerlo en mi refugio de la habitación al fondo de casa mientras admiraba a la Jo de Louisse M. Alcott y soñaba ser algun día como ella.

He viajado desde Roma y Grecia hasta Cabo Esperanza, he visto levantarse a Scarlet de la nada misma y asegurado yo también que mañana será otro día a la vez que acompañaba a Poirot en el Orient Express camino a visitar a Viola... tantos lugares, historias, amigos que me han enriquecido a traves de los años dandome lo que mi querida Hanna siempre quiso para mí: imaginación sin límites! De manera tal que al fin de cuentas, siempre fuese libre... de pensar, de creer, de opinar distinto... incluso de amar.

Y pese a las miles de posibilidades que la tecnología nos acerca hoy, nada se compara con el aroma de las hojas gastadas por el tiempo ni con el sonido de un libro al abrirlo por primera vez...

Para celebrar su día y en honor a quien nos presentara, esta noche Mi Principito y yo, nos reencontraremos como tantas veces, a medio camino entre el Sahara y mi sofá.-

1 descorrieron el telón: