![]() |
Imagen extraida del Blog de Guada |
Los
cronistas más serios del barrio del Ángel Gris coinciden en destacar la
propensión de sus habitantes hacia los amores imposibles.
Así,
mientras los jóvenes de otros barrios se enamoran de muchachas groseramente
posibles, los hombres de Flores parecen condenados a amar —casi siempre en
secreto— a mujeres que no serán para ellos.
Y
en honor a esas damas, los Hombres Sensibles hacen lo que hacen.
Algunos
emprenden desde chicos el estudio del violín, únicamente para aprender a tocar
un vals en obsequio de su amada. No importa que ella no alcance jamás a oírlo.
Ese no es el punto.
Otros
indagan los secretos de la versificación y se sumergen en el dolor para lograr
una poesía.
Piensan
los Hombres Sensibles que siendo mejores merecerán ser amados. Y para la ética
sentimental de este barrio, los mejores hombres son artistas, valientes,
tristes o locos.
Existe
una leyenda que dice: “Hay para cada hombre una mujer, una sola, que reúne
todas las virtudes que ese hombre sueña. Su belleza está hecha para deslumbrar
a ese hombre. Su voz ha sido creada para seducirlo. Su inteligencia, para
suscitarle ideas amables. Su ternura, para hacerle dulce el diario sufrimiento.
Esa mujer existe y anda por esas calles. Pero el destino ha decidido que nunca
jamás se crucen los caminos de ningún hombre con la mujer que para él ha sido
concebida”.
Dijo
Manuel Mandeb en sus “Memorias”: “No hay mejor amor que el que nunca ha sido.
Los romances que alcanzan a completarse conducen inevitablemente al desengaño,
al encono o a la paciencia; los amores incompletos son siempre capullo, son
siempre pasión”.
Por
eso, señores, si acaso atesoran ustedes uno de estos metejones locos, a no
arrepentirse. Sigan soñando y esperando lo imposible. Aunque sepamos que
nuestras ilusiones no habrán de cumplirse nunca, sigamos acariciándolas.
Alejandro Dolina
No hay mejor amor que el que nunca ha sido... Sera tan asi?
ResponderEliminarCreo que no, que nada se compara con lo real... imperfecto seguramente, pero tangible y real.
ResponderEliminar