By Jeannette Woitzik
 
 
 
No me creas cuando digo 
que quiero anclar, 
mi barco se hundió 
(con hache) 
hace mucho tiempo. 
  
No te entusiasmes cuando llore, 
mis lágrimas no son gran mérito. 
  
No me creas cuando grite, 
no me creas cuando sangre. 
  
Si juro tener miedo y pesadillas, 
si me quejo que me pica, 
no me creas. 
  
Cruzá los dedos si digo siempre, 
no apuestes un centavo si digo nunca, 
cambiate de vereda si pido nido. 
  
Reíte de mis muertos, 
desentendéte de mis versos. 
  
Hagamos una cosa: 
no me creas nada, 
ni siquiera este poema. 
  
  
Ahora, 
si igual insistís 
y querés besarme, 
sabé que no pienso 
ofrecer resistencia. 
  
(eso sí, después no digas 
que no te avisé.) 
 | 
0 descorrieron el telón:
Publicar un comentario